En el mundo de los negocios, la imagen es muy importante. Con las nuevas soluciones de personalización del packaging puedes hacer que tus cajas, paquetes y bolsas sean mucho más que un envoltorio.
¿Por qué te interesa personalizar el packaging de tu negocio?
Cuando entregas un artículo a tu cliente, todos los detalles son importantes. Aunque los usuarios pagan por el contenido, la adquisición siempre es mucho más satisfactoria cuando viene con un envoltorio práctico y atractivo.
Aparte del diseño de packaging (dimensiones, peso, materiales…) te interesa prestar atención a los aspectos de personalización (nombre de la empresa, logo, lema…). Esos pequeños detalles llevan aparejados múltiples beneficios desde el punto de vista empresarial:
- Potencia la imagen de marca y la hace más visible.
- Añade un elemento diferencial a tus productos y servicios.
- Fideliza a los clientes mejorando su capacidad de recuerdo.
- Atrae a nuevos consumidores.
¿Cuáles son los sistemas de personalización de packaging más populares?
Para convertir tus bolsas y envases en algo especial, puedes recurrir a alguna de las siguientes técnicas.
Offset
El offset es un sistema de impresión indirecto. Es decir, la imagen se imprime primero en una superficie, luego en un rodillo y de ahí pasa al soporte final, que puede ser de papel o de plástico. De este modo, la impresión queda divida en dos fases: una primera fase en la que varios rodillos entintan una placa metálica y una segunda fase en la que pasa a un rodillo de caucho que es el que entra en contacto con el soporte para imprimir la imagen.
La principal ventaja de este tipo de impresión es que ofrece mejores acabados que la impresión directa, sobre todo cuando se trabaja con varios colores. El sistema offset es además el más recomendado en soportes de papel kraft porque no deja huella en el dorso.
Serigrafía
Esta es una de las técnicas de impresión más antiguas y una de las más tradicionales en la personalización del packaging, especialmente el monocromático. En este caso, la tinta se transfiere al soporte mediante el uso de unos marcos que solo dejan pasar la pintura a en aquellas zonas que se corresponden con la imagen que se quiere grabar.
El sistema funciona muy bien cuando se trabaja con un único color, pero se complica cuando aumenta el número de tonalidades porque implica trabajar las capas cromáticas una por una. Cuantas más plantillas hagan falta, mayor será el desembolso económico.
Tampografía
Quienes le dan prioridad al ahorro de tiempo y dinero suelen recurrir a la tampografía. Este sistema de impresión viene a ser muy parecido a estampar un sello. El logotipo se graba sobre una placa metálica o de PVC que se recubre de tinta. Un tampón de silicona ejerce presión sobre esta placa, recoge la pintura y la estampa en la superficie final.
Este sistema de estampación viene muy bien para ahorrar costes en la personalización del packaging, pero presenta algunos problemas con los acabados en superficies como la madera o el metal.
Flexografía
Es un sistema de impresión directa y rotativa que se emplea sobre todo en la personalización de etiquetas autoadhesivas. Durante la impresión se utilizan varias planchas flexibles y tintas con base de agua que se secan muy rápido y que son aptas para su uso en envases de alimentación.
Con respecto a otros métodos de impresión, es un sistema bastante económico, sobre todo cuando se trabaja con grandes volúmenes de material. Otra de las ventajas es que el tamaño del soporte tampoco suele ser una limitación.
Huecograbado
Se conoce también como calcografía o rotograbado y es otra una técnica de impresión directa. En la actualidad ha quedado relegada a un segundo plano y principalmente se utiliza en la impresión de embalajes flexibles. Al igual que el offset, es un sistema de impresión rotativo, pero en este caso los cilindros trabajan en cadena, cada uno con un color, e imprimen directamente sobre el soporte mediante presión.
La principal ventaja es que se puede trabajar con formatos muy amplios y a gran escala, con una textura final similar a la fotografía tradicional. Sin embargo, es un sistema muy caro y las tintas empleadas son más contaminantes que las utilizadas en otras técnicas de impresión.
Digital
A esta categoría pertenecen diferentes modalidades de impresión que comparten una misma base de funcionamiento: no es necesaria la utilización de ningún tipo de planchas. La impresión digital puede ser tanto por inyección de tinta como por láser o LED. En las primeras la imagen se forma mediante la expulsión de diminutas gotas de tinta y en la segunda mediante el tóner, un polvo
muy fino y con carga eléctrica que es capaz de pigmentar el soporte.
La impresión digital ofrece la ventaja de la inmediatez, porque basta con la carga de archivos que han sido creados digitalmente. Pero para tiradas muy largas, el offset no solo ofrece mayor calidad, sino que reduce significativamente los costes.
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